Parte muy importante para una buena relación con el cliente, quizás porque comencé mi carrera como profesor, primero en la escuela de Sistemas Informáticos, luego en Professional Training y por último danto toda la formación durante quince años en el Grupo Prisa y todas las empresas del entonces poderoso emporio, considero que es muy importante prestarle a la mayor atención a la formación.
Generalmente el informático es huraño por naturaleza, tiene miedo a mostrar sus conocimientos, como si con ellos fuera a perder su poder, piensa, «si enseño a manejar bien esta herramienta o programa, ya no me van a necesitar y por tanto voy a perder el cliente o el trabajo o lo que sea».
Esto podría ser cierto en determinados casos extremos, pero en general está lejos de la realidad, lo que el cliente quiere es sentirse seguro en su trabajo diario, no tener dependencia para realizar el mínimo cambio en su web y poder ir configurando pequeñas cosas a su gusto.
Si tu trabajo es bueno y has profundizado en el tema, sucederá lo contrario, con esa pequeña formación valorará más tu trabajo ya que comprenderá el tiempo utilizado y la dificultad de lo que has hecho y siempre querrá que sigas estando a su lado como consultor.
Por tanto, ¿debería ser igual el coste de un proyecto donde al final el cliente aprende, tiene autonomía y se integra en el mundo digital, en comparación con aquellos que no enseñan ni la uñita al cliente para así tenerlo siempre atado?